Ya sabía yo que iba a ser buena idea poneros juntas a ordenar la biblioteca de media tarde para que limarais asperezas.
Pero si hasta vais vestidas a juego como casi todas las adolescentes!!
-Por ingredientes?? Y eso, cómo es?
-Hemos pensado Charlotte y yo que como es la biblioteca que usan los peques en la hora de la merienda, estaría bien ordenar los libros según los ingredientes que se nombren en su interior.
Por ejemplo, todos los que nombren vasos de leche, yogures o queso van juntos.
Luego están los que nombran bocatas de chorizo, salchichón, fuet, longaniza, butifarra...
Por otro lado, los que sus protagonistas disfruten de la fruta: manzanas, limones, peras, macedonia, sandía, cerezas, moras... incluimos zanahorias también!!!
-Ah, bueno, pues nada, a saber si encuentran lo que buscan, pero mientras tanto, se entretienen. Y habéis hecho un apartado de dulces, golosinas, chocolate, pasteles o croissants???
-Ah, bueno, pues nada, a saber si encuentran lo que buscan, pero mientras tanto, se entretienen. Y habéis hecho un apartado de dulces, golosinas, chocolate, pasteles o croissants???
-Noooo, hemos desterrado el azúcar para apartarlo de la vista de los peques.
-Si es que pensáis en todo!!!
Oye, una manera de lo más original de ordenar los libros.
ResponderEliminarBesos.
charlotte lleva chaqueta rosa y falda blanca, marina lleva chal blanco roto y falda rosa. van como complementarias. casualidad? no lo creo, en la biblioteca silvestre nada es casual. ;)
ResponderEliminarconfieso que ese criterio para ordenar los libros no lo habría adivinado ni al vigésimo intento, estas chicas son muy originales y creativas!
sobre el clan de las pelirrojas mejor no hablar, no vaya a ser que se una jana y os revolucione la biblioteca...
besitos!!
¡Hola Rosana! Qué guapas van Charlotte y mi tocaya, la gama cromática es muy agradable a la vista. En cuanto al método de ordenación, la mar de curioso, pero deduzco que algunos clásicos han quedado fuera, como Hansel y Gretel o Charlie y la fábrica de chocolate, e incluso Matilda.
ResponderEliminar¡Besos!
Hola Devoradora! Mis chicas otra cosa no, pero originales son un rato!!
ResponderEliminarBesitos
Hola Chema. Muy observador pero justo al revés. Charlotte es la pelirroja y Marina la que tiene ojos mar.
ResponderEliminarEs cierto que cuando pongo dos o más muñecas "en escena", me gusta vestirlas a juego, o que combinen o similares. Por ejemplo, nunca pondría a una de verano y a otra de invierno, porque me parece que no podría darse el caso, no resultaría real. Que son manías?? Sí, son manías, pero... así soy.
No quiero ni pensar en lo que pasaría en nuestra "apacible" Biblioteca si se presentase Jana!!!! Madre del amor hermoso, el caos sería seguro!! Mejor, intenta seguir educándola tú, aunque parezca que no, la educación va calando...
Besitos, guapo!
Mira, Marinette, no seré yo quien critique los gustos "ordenatorios y clasificativos" de mis chicas, pero ciertamente, mira que dejar fuera clásicos taaaaan bonitos como Matilda o Hansel y Gretel??
ResponderEliminarDe todas formas, fijándome un poco en la estantería, veo que han dejado a Alicia (con la mesa de té llena de pasteles), Mary Poppins (con la escena del té que acabó en el techo), un libro llamado Polish Apple Pancakes, que suena a dulce claramente, e incluso Mujercitas, que seguramente algo dulce comerán. Así que no me fío un pelo de que hayan hecho lo que dicen. Ufff, si tú supieras!
Besitos a montones
Hola Rosana!!
ResponderEliminarMe alegro que tus chicas hayan aclarado el malentendido del clan de las pelirrojas, estas cosas es mejor solucionarlas cuanto antes. Se ven muy buenas niñas y seguro que su tarea compartida en la biblioteca de media tarde les ha ayudado a estrechar su amistad.
Ciertamente el criterio que han decidido seguir para ordenar los libros es digno de estudio en sí mismo, espero que las barris se aclaren cuando vayan a la hora de merendar!!!
Besitos mil,
Susana, guapa!!
ResponderEliminarEstas niñas sí tienen buen corazón en el fondo, pero muuuuuuy en el fondo, y eso hace que la superficie tenga tiempo a maquinar diabluras varias antes de pensar bien las cosas.
De todos modos, realmente a los barris les ha dado completamente igual la manera estrambótica de ordenar los libros, porque ellos se conocen las tapas de sus favoritos y los cogen sin prestar atención al orden. Como era de esperar en niños que aún no saben el abecedario!!
Besitos